Con la desaparición gradual de los pitillos / pajitas / popotes plásticos desechables y la popularidad de los pitillos reutilizables metálicos, aumentan los casos de accidentes y muertes por accidentes.
Ya se han reportado muchos accidentes de adultos y niños que accidentalmente se han enterrado los pitillos metálicos en la garganta o por los ojos, causándoles graves lesiones incluso la muerte.
Elena Struthers-Gardner, una mujer de 60 años falleció al tropezar y caer sobre el pitillo metálico que tenía la jarra que llevaba. El pitillo atravesó su ojo y se introdujo en el cerebro.
Charlie DeFraia, un niño de cuatro años de Nueva York, casi fallece, cuando un pitillo metálico le atravesó la garganta y perforó una arteria.
En redes sociales se encuentran varios video de niños caminando con vasos que tienen pitillos metálicos, se tropiezan y el pitillo se les entierra en la garganta. Algunos menores los utilizan para jugar y lesionan a otros niños.
JAMÁS UTILIZAR PITILLOS EN EL CARRO
Por otro lado, está la contaminación de esos pitillos. Por más de que se laven cuidadosamente, los estudios demuestran que acumulan bacterias y moho con el tiempo.


